El bienio 20-21 será recordado como el año del comercio electrónico, de eso no hay duda. Agraciada por un trágico evento imprevisto, la industria de las ventas en línea ha experimentado un desarrollo vertiginoso en 2020 y no será una sorpresa si esta avalancha de ventas en línea continúa en el futuro.
Se trata de un sector que viene creciendo a ritmos sorprendentes desde hace algún tiempo pero que, tras las medidas de seguridad tomadas para hacer frente a la pandemia Covid-19, ha experimentado una nueva fortuna y se ha distinguido como la promesa de futuro para numerosas actividades.
De hecho, los e-commerce fueron las actividades generales menos afectadas por la pandemia y las que mostraron los signos más prometedores de recuperación tras el fin del lockdown.
Se trata de actividadescomo Online ecommerce Company, una nueva plataforma de e-commerce, que nacieron recientemente pero que han tenido ideas claras desde el principio sobre cómo moverse dentro del mundo de las ventas online.
Pero echemos un vistazo más de cerca a cuáles son las principales características de las startup de comercio electrónico que tienen éxito en la actualidad.
El rostro del nuevo e-commerce: realidades virtuales en todos los aspectos
La prerrogativa fundamental de cualquier realidad que quiere tener éxito en el mundo de la venta online hoy parece ser la experiencia.
Los usuarios que pueblan la web hoy en día han desarrollado una conciencia diferente de las herramientas que la web pone a disposición e interactúan de manera diferente con la realidad virtual. No cabe duda de que se trata de una nueva revolución cultural que, como tal, necesita sus propias características distintivas y su propio simbolismo de referencia.
Para un comercio electrónico, esto significa que ya no puede adoptar un enfoque simplista y minimalista de las ventas en línea sin una estrategia adecuada. Crear un catálogo de productos en línea ya no es suficiente: vender en línea también se ha vuelto más complejo que vender sus productos al por menor en una tienda física.
Ahora se espera una experiencia completa de un comercio electrónico. Pero ¿qué significa esto?
El enfoque virtual: la USP y la experiencia del usuario
Para construir una experiencia virtual integral, las plataformas de venta online se están estructurando siguiendo dos vectores principales.
Por un lado, está la propia organización empresarial: intentar dar carácter al negocio, descubrir los signos distintivos de la oferta y potenciarlos. En general es la transposición del principio de la USP, Unique Selling Proposition a la realidad virtual.
Crear una comunicación multimedia entre empresa y cliente que trascienda la impersonalidad de una pantalla de un PC o de un teléfono inteligente. Aprovechando toda la flexibilidad del online y ofreciendo una mezcla equilibrada de contenido escrito, imágenes e incluso videos, de hecho, el foco está en la marca.
Es decir, el objetivo es devolver una imagen de la propia empresa que le comunique al cliente exactamente lo que está buscando y logre hacerlo con suficiente énfasis para transmitir seguridad y confiabilidad. Un sitio, al igual que una empresa física, pretende ser recordado.
El contenido es el rey: la memoria digital
La memoria del mundo virtual se basa en la capacidad de un comercio electrónico para hacerse notar en línea. La USP adquiere valor, para un comercio electrónico, sólo si su oferta obtiene tal caracterización que responda precisamente a laspreguntas y deseos de los usuarios que navegan por la web.
Las nuevas start-ups de venta online muestran claramente la importancia de este aspecto: no existe una empresa neófita que no preste atención tanto a los contenidos que se colocan en Internet como a su catálogo.
La atención en el cuidado de la oferta pasa también necesariamente por la creación de contenidos que satisfagan los aspectos más irreales de las necesidades de los compradores. Ya no basta con arreglar un producto con un nombre y una imagen.
Es necesario dar personalidad propia a cada oferta, para que destaque entre las demás y capte la atención del abanico de compradores a los que se quiere hacer referencia. De hecho, de cada 100 personas que buscan un producto, potencialmente puede haber 100 gustos y formas de pensar diferentes.
Los productos presentes online se caracterizan cada vez más por responder precisamente a uno de estos 100 gustos y formas de pensar diferentes. Esto es gracias a los contenidos.
Experiencia de usuario: no solo e-commerce
Otra característica clave de las empresas emergentes de ventas en línea es la diversificación de las estrategias de marketing.
La consideración básica es que el online presenta muchos más retos que la venta física precisamente porque hay que apoyarse en distintos canales cuyo funcionamiento no es tan inmediato como uno puede pensar.
No basta con crear una buena plataforma rica en contenidos: es también y sobre todo indispensable confiar en una buena campaña de marketing. Pero, ¿cómo funciona el marketing online?
No hay espacios publicitarios en radios o televisores. No se colocarán flyers o vallas publicitarias en los espacios designados para tal fin.
Las ventas en línea ahora tienen que depender de las redes sociales y los motores de búsqueda para sus campañas de marketing. En otras palabras, a plataformas privadas que son de libre uso y accesibles al público. El objetivo es garantizar a los usuarios una experiencia global que les permita interactuar con la plataforma de la forma que prefieran.
Las campañas en Facebook, Instagram, Google o incluso TikTok, de hecho, son fundamentales para acercar al usuario al propio negocio.
Los consumidores de Internet de hoy buscan sensaciones, quieren quedar impresionados: esta es la user experience a la que aspiran las empresas emergentes de ventas online.
Start-up en el comercio electrónico: la novedad
Una verdadera revolución de la comunicación, las nuevas empresas de ventas en línea, como las empresas de e-commerce, dan fe de cómo el tercer milenio está ofreciendo algo radicalmente nuevo.
Su objetivo principal es vender los productos de su catálogo, pero la forma en que se hace representa una novedad absoluta. Siempre y en todo caso ventas, por lo que el gigantesco salto realizado no se siente en toda su importancia.
La relación vendedor-comprador permanece en su plenitud original, pero ahora el esquema no permanece en un segundo plano, sino que es en sí mismo parte del producto.
Si la venta al por menor en una tienda física tenía como esquema la relación con el comerciante, lo que podría hacer más o menos memorable la compra en sí, ahora lo que se vende es un objeto y un servicio junto con la experiencia que brinda al usuario.
¿Un ejemplo sorprendente? ¿Por qué comprar una empresa de comercio electrónico de Pepsi en línea y no en Glovo? Lo que se evalúa es la experiencia que uno brinda con respecto al otro. En otras palabras, por el mismo precio y producto, se adquiere la capacidad de uno para brindar un servicio adicional.