Una mujer entra en un concesionario de Lamborghini. Ve un Reventón Roadster que le parece perfecto y se acerca a inspeccionarlo. Al agacharse para tocar su interior, sin querer se le escapa un sonoro pedo.
Muy preocupada, se gira nerviosamente para ver si alguien se dio cuenta, con la esperanza que no hubiera nadie.
Pero fatídicamente se encuentra con que a su lado está plantado un vendedor.
– “Buenos días, señora. ¿Puedo ayudarla en algo?”
Muy incómoda, porque era evidente que el vendedor había tenido que escuchar el pedo, le pregunta disimulando:
– “Buenos días, ¿cuánto cuesta este coche tan maravilloso?”
Y el vendedor, con una media sonrisa, le dice:
– “Señora, si se tiró un pedo cuando vio el interior, ¡se va a cagar cuando le diga el precio!”
jaja ya lo sabia jajaj es buensimo xDDDD
Jajjaja!!!
No lo conocía.
;-)
jaja, menudo apuro que pasaría la señora.
jajaja