El sapo gigante

Las ranas que no cumplieron
Las ranas que no cumplieron

Una hembra del venenoso sapo gigante pone hasta 35000 huevos cada vez. Por eso, los 100 ejemplares que Australia importó de Hawai en 1935, para que terminaran con una plaga de escarabajos en la caña de azúcar, tienen hoy en día millones de descendientes.

Jamás se comieron un escarabajo, y liquidarlas es ahora allí un deporte nacional.

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4 comentarios en «El sapo gigante»

  1. No hay mal que por bien no venga. Seguro que hay alguno que
    monta un bar, y pone de «tapa» ancas de rana.

  2. A mi me gustan los animales, pero hay que reconocer que algunos son muy asquerosos, por lo menos para la vista, este es un claro ejemplo, no?

  3. Hola Andrés, contarte que en mi última entrada he hecho una comparativa con una herramienta online (IPLocals) para ver la calidad de los distintos alojamientos aprovechando IP Reverse. En esa comparativa he incluído a mis Blogs amigos y recomendados entre los cuales por supuesto está el tuyo. Algún día tendré que decidirme a cambiar, pero me da una pereza que no te puedes imaginar. A parte de lo que pueda suponer de mayor gasto. ¿Cuánto pagas por el tuyo? porque los algo más de 100€ al año que pago por el mío ya me parece mucho.

    Con relación a lo de los australianos y sus ranas… alguno muy malo diría: «¡que se jodan! Mira ahora tienen en qué entretenerse :)

    Un abrazo.

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