Las boas constrictor o anacondas no son serpientes venenosas, por lo que deben reemplazar ese poderoso sistema de caza por una mejor habilidad y mayor rapidez que otros familiares ofidios. Son serpientes que pueden llegar a medir grandes longitudes y comer animales de gran tamaño, como búfalos, gacelas o incluso hombres. La Boa constrictor puede alcanzar los 50 pies de envergadura, pero la Anaconda le aventaja, tanto en longitud, como en grosor.
Para cazar, saben estar alerta y ser pacientes. Esperan entre la maleza, se ocultan en árboles o incluso se camuflan en una charca con tal de mimetizarse con el entorno mientras esperan la ocasión perfecta. Suelen enroscarse en forma de círculo sobre sí mismas, dejando su cabeza medio oculta en el centro de este círculo y sólo levantan la cabeza cuando creen oír presas en las cercanías. Esta forma de enroscarse les sirve para salir disparadas en forma de muelle cuando deban atacar.
Cuando divisa una presa, se abalanza sobre ella y la rodea con su sinuoso cuerpo, enroscándose para estrangularla. La boa aprovecha los momentos que su víctima intenta inspirar aire para oprimir más el cuerpo de la presa, facilitando pronto el sofoco fatal. Se puede ayudar incluso de un árbol colindante para obtener fuerza si el animal ofrece resistencia.
La anaconda escucha el ritmo cardíaco de su presa y sincroniza sus constricciones con los latidos del corazón para debilitar este último.
Cuando la víctima está moribunda, la cubre con una baba y aprovecha la gran dilatación que sufre su cuello y la elasticidad de su cuerpo para engullirla poco a poco. Las boas y anacondas poseen el maxilar inferior de su boca partido en dos, por lo que pueden abrirla sin problema y con una gran elasticidad.
Una vez se tragan a la víctima, ayudadas de los movimientos peristálticos que provoca su esófago y unos dientes superiores en el interior de la boca, se arrastran como pueden hasta un lugar seguro, donde realizan una lenta digestión ayudada por los ácidos de alto grado pH que descomponen la presa.
La digestión puede llevarles un mes entero, y posteriormente pueden pasar varios meses sin ingerir nada.
Da mucha impresion ver cómo se come a su presa. Y no me extraña su digestión tan lenta sabiendo lo que come.
Que miedo con esa anaconda o boa, me alegra mucho aprender sobre eso para estar preparado esta muy chevere esta pagina voy a estarla visitando. Adios
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Me alegra aprender en esta pagina porque me encantan losanimales no se si a ustedes pero a mi si luego echare otro vistazo