Ser la encargada de una tienda es muy estresante, tengo que vender y estar atenta de que no falte ropa ni nada de lo que los clientes quieren. Así que me toco comprar cosas y hacer pedidos a los proveedores. También tengo que ir a comprar las revistas de actualidad para que los clientes estén cómodos en la tienda mientras esperan su turno.