La Cicciolina

Rubia, con un osito de peluche en la mano, portando un vestido blanco (símbolo de la pureza y la virginidad) y llevando sobre su cabeza una casta corona de flores, uno podría confundirla con una virgen vestal. Así sería de no mediar un pequeño detalle que no escapa al ojo del buen observador: sí, señores, … Leer más