Después de disfrutar viendo el clásico de Stanley Kubrick, tenía ganas de ver la segunda parte. Una de las cosas que más me ha sorprendido, es que pasaran unos 15 años entre las dos entregas de la película. Creo que esta película lo tenía difícil, porque siempre se la comparará con la clásica “2001, Odisea en el espacio”, pero a mi me parece que está muy a la altura.
«2010: Odisea dos» es mucho más accesible que la primera, donde la gente se quedó a cuadros sin entender nada. Aquí parece que se dedicaron a explicar las cosas que nadie entendió de la primera película y a desarrollar la trama. Pertenece al libro homónimo de Arthur C. Clark, aunque esta vez el director no fue Kubrick, sino Peter Hyams.
La película cuenta cómo se unen los rusos y los americanos para investigar lo que pasó con la nave espacial Discovery que nueve años antes fracasó en su misión por causas misteriosas. Quieren reactivar a Hal 9000 y que les explique las cosas que no les quedaron claras. Se embarcan rumbo a Jupiter, pero descubren que algo se cuece en sus lunas Io y Europa, aparte que en el final, algo sorprendente ocurre en Júpiter.
La película es de 1984 y se nota que está hecha durante la Guerra Fría, por la constante fricción de los gobiernos ruso-americano, convirtiéndose el final en un discurso pacifista sobre la actitud del hombre al estar siempre en guerra.
Se mantiene el suspense a lo largo de la película, siendo el punto culminante, cuando requieren la ayuda de Hal 9000 para utilizar el Discovery de impulsor, exponiendo la integridad de la nave al peligro. Al final, Hal 9000 dice aquello de: “Gracias por decirme la verdad”.
La música a lo largo de la película, aumenta el grado de misterio y suspense bastante, con sus siniestros soniditos que suenan a lo largo de la película y que a mi me pusieron los pelos de punta. Ya de entrada, suena aquello de “¡Dios mio, hay miles de estrellas!” que fue lo que profirió Bowman en la primera película y que da bastante suspense a la cinta.
En fin, que a mi me gustó mucho y está a la altura de su primera entrega, mucho más asequible al público, aunque para un purista, siempre quedará mejor decir que nunca superará el clásico de Kubrick de 1968.
Excelente sinopsis y crítica¡